Cómo educarlo para no morder:
Esta conducta es natural en los gatos bebés; pelean con las paticas y atacan con uñas y dientes. A esa edad, debemos dejarlos que mordisqueen y recorran el espacio, ya que es fundamental para su conducta exploratoria. Cuando crecen, debemos enseñarles que la agresividad no es la mejor manera de relacionarse con los humanos. Pasadas las 3 semanas, cada vez que el gatito nos muerda en busca de juego, debemos fingir “estar muertos” o emitir un chillido, ignorarlo completamente y dejar de jugar, así el gatito relaciona el fin del juego con su actitud mordelona.
Para motivar su espíritu cazador y que tus manos no sufran las consecuencias, puedes usar un juguete tipo vara de pescar. Dale su recompensa cada vez que muerda sus juguetes y no a ti.